Primero, tome las rodajas de bagre y con el cuchillo, que usted mejor maneje, retire la parte del bagre que está por el lado del hueso. De cada rodaja deberían salir alrededor de cuatro porciones. Cuando tenga todas las porciones, llévelas a un plato hondo y déjelas en la nevera mientras continúa con el resto de pasos de la receta.
En una tabla pique, lo más fino posible, el ají dulce y el cilantro (lo que le quepa en la mano). Luego, mezcle con el ajo (previamente picado). Adicione sal y pimienta al gusto. Incorpore los ingredientes.
Retire el bagre de la nevera y mézclelo con el marinado anterior. Refrigere de nuevo.
Tome suficientes lechugas para cada sándwich. Lávelas como lo hacían sus padres o amigos; pregúntele a su mamá o a sus tías, ellas tendrán los mejores consejos.
Lave el pepino con agua y córtelo en rodajas muy delgadas y reserve.
Lave y pele la zanahoria, luego ráyela por donde están los huecos más grandes del rallador.
Con un rallador que tenga los cortes gruesos, ralle el tomate sobre un plato. Luego, pique la cebolla a su gusto, preferiblemente no tan gruesa, reserve.
En una sartén u ollita vieja a fuego medio, donde muchos suelen hacer sus guisos caseros, adicione la mantequilla. Una vez esté derretida, agregue la cebolla y deje cocinar, sin dejar de remover. Luego, agregue el tomate, sal y pimienta al gusto y mezcle bien. Tape y cocine por 20 minutos hasta alcanzar una consistencia de salsa. Deje enfriar.
- Paso por la maicena y fritar
En una taza grande coloque una buena cantidad de maicena. Saque el bagre de la nevera y trozo por trozo páselo por la maicena, asegurándose que se pegue por todos lados. Repita este proceso con todos los trozos de bagre.
En una sartén con aceite a fuego alto, lleve los trozos de bagre. No sobrecarge.
Esparza mayonesa por todos los lados del pan. Añada el hogao. Tome el pan y haga una cama de lechuga, pepino y zanahoria. Para terminar, adicione los trozos de bagre y ¡Voila!
Disfrute de un delicioso sándwich de bagre.